El coño de Lindsay Lohan

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Sí, vale, nos gusta Lindsay Lohan. Nos gusta su pelazo, su actitud, lo borracha que es, lo desordenada, lo anoréxica, lo bulímica, lo pedorra y caprichosa... Nos encanta ese halo de niña prodigio problemática en el que está envuelta. De hecho, yo me atrevo a augurarla un futuro prometedor en el mundo del cine más allá de los papeles en comedias ligeras de adolescentes.

Sin embargo, estamos un poco hartos de que sólo sea noticia por enseñar sus partes pudendas. Lindsay: échate novios, rompe con ellos, cambia de look, agárrate una moña en una discoteca de moda, peléate con Nicole Ritchie o Tara Reid... Nos encanta que seas noticia por todas esas cosas. Pero como bien reza nuestro refranero español: hagas lo que hagas, ponte bragas.

Ay qué tos más mala tengo

La brisilla habrá sido inoportuna, pero oyes, qué frescor más bueno me sube

Tengo la vulva como un huevo kinder