Katovizate!

12.9.06

La vida de Maraya: las tordas también lloran

No hay nada más políticamente incorrecto en el mundo que confesar abiertamente que te gusta Mariah Carey, más conocida por todos como Maraya. De hecho, es fácil conseguir ser el centro de atención (para mal) de cualquier reunión social si reconoces tu pasión por esta gran diva del arembí americano. Da igual la música que escuchen los de tu alrededor, da igual que sean indis, que les guste la pachanga o que sean jevis. Todos te odiarán.

De joven no me gustaba Maraya. Era más fan de Madonna y Whitney Houston. A medida que fui ganando años (y ella kilos), empecé a idolatrarla. Sobre todo a raíz de su cambio de imagen: el paso progresivo de guacanita pavisosa tapada hasta las orejas, a oronda y voluptuosa reina del mal gusto, fue fundamental para mí. Siempre fui fan de los excesos y adoro a Maraya porque es superexcesiva.

1- Es capaz de ir embutida como una morcilla sin romper el vestido.

Te lo digo yo

2- Es capaz de desafiar las leyes de la gravedad y de los cirujanos plásticos con los kilos de colágeno y silicona que lleva en el cuerpo.

Tetismos

3- Es capaz de hacer una canción de seis minutos sólo con grititos. Bueno Bjork también sabe hacerlo (y más largas), pero la islandesa es intelectual y Maraya no.

Vivo poyeya

4- Es capaz de llenar una habitación de mariposas (papel pintado, lámparas, ropa de cama), no saber cómo funciona la ducha de su casa o dedicar una estancia a La Sirenita. Todo real y visto en un documental de la MTV.

Me gusta el deporte

5- Es capaz de hacer la segunda peor película de la historia, Glitter. La primera es Barridos por la Marea, pero Madonna es intelectual y Maraya es retrasada. Y es capaz de liarse con Luis Miguel (y enamorarse de él!).

No me digáis que no es mutante o algo, esta chica. Pero lo más importante de todo es que ha sido capaz de remontar de una situación crítica profesional y personal gracias a su personalidad. Que nos guste o no, sea más o menos tolai, la tiene. Y si hay algo que me gusta más que los excesos, son las historias de superación.

La joven Maraya, ajena a la mediocridad de la clase media

Sobre todo porque Maraya, ahí donde la veis, no tenía donde caerse muerta de jovenzuela. Pero ella siempre fue un poco trepa, y así, con esa cara tan rara, hija de irlandesa y venezolano, y su chorro de voz, nuestra querida aries pasó de cantar gospel en la iglesa y servir mesas a drogarse en las fiestas más glamurosas y codearse con todo el famoseo, todo ello gracias a Tommy Mottola, magnate de Sony, al que encandiló con 19 añitos. Antes de casarse con él, en 1993, Maraya ya había conseguido varios números uno en las listas de todo el mundo (gracias a temazos ochenteros como Emotions y Someday), había grabado tres discos, y se había agenciado unos cuantos Grammys y American Music Awards.

Maraya, Tommy y su envejecido círculo de amigos

Aparentemente todo era felicidad en la vida de nuestra Maraya: su cuarto disco, Music Box, vendió 25 millones de copias en todo el mundo, y su quinto, Merry Christmas, su mayor despropósito, es aún hoy el disco navideño más vendido de la historia de la música. De esta época son esos temas románticos infumables que siempre se meten en los recopilatorios de San Valentín o que interpretan las aspirantes a triunfitas en las pruebas de selección de OT: Without you y Hero.

Tanto Grammy y las puntas superabiertas

Pero la pobre Maraya, en la soledad de su mansión de Beverly Hills, no sonreía. Las biografías oficiales dicen que Mottola era un auténtico nazi y que la tenía más derecha que una vela (no hay más que leer las noticias sobre la depre de Thalía, su actual esposa). Como suelen decir los cursis, estaba encerrada en una jaula de oro. En 1997 se separa y comienza su declive, principalmente por un giro brusco al jipjop-urban que nadie se esperaba de una artista de música ligera. Su público no acaba de entender esa abrupta transformación de jovencita puritana a zorrón voluptuoso. Su tormentosa relación con el cocainómano cantante Luis Miguel fue lo que le faltaba para terminar de rematarla. La ruptura con el mexicano le llevó al hospital de cabeza. Según sus agentes, "estaba exhausta".

Maraya, siempre con las tropas

Un periodo de descanso, algo de terapia y, según dicen los rumores, el conveniente tratamiento de psicofármacos consiguieron volver a despertar a Maraya, que, con su último disco, The Ematipation of Mimi ha conseguido recuperar el favor del gran público y alcanzar lo más alto de las listas, especialmente las americanas. Vaya jit el año pasado con It's like that, por no hablar de ese baladón romántico que nos hizo recuperar la ilusión del amor el verano pasado: We belong together. Luego unos raperitos de moda y unas canciones gospeleras bien producidas y... ¡ole! ¡Discazo MTV!

Maraya también va a la playa y se le endurecen los pezones, como la gente corriente

Sus traumáticas experiencias le han convertido en un alma cándida. Ha expresado su deseo de ayudar a su antaño rival y compañera, Whitney Houston, ofreciéndole una colaboración en su próximo disco (y así ganar unas perrillas para la clínica de desintoxicación). Ya ha anunciado que lanzará su propia fragancia y que producirá y será la estrella de su propio show en Broadway. Vamos, que está otra vez atómica.

Felicidades Maraya, te lo mereces.

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8 Comentarios:

  • Ole, ole y ole...me he partido de risa con el post!!!!! es cierto la maraya (a pesar de que me raya) es un crack!!! superafavor

    By Blogger Mr Grieves, at 9:05 p. m.  

  • Éste es el mejor regalo que me podían hacer un día como hoy.

    Sniff, sniff...

    By Blogger Unknown, at 9:12 p. m.  

  • Es mi neumatica preferida. Bueno neumatica o mejor dicho recauchutada

    Ah y además tengo el music box y me molaba el video de dreamlover!

    By Blogger Víctor, at 10:17 p. m.  

  • Después de este post de autosuperación:... soy incapaz de subastar el vinilo de Emotions!!!

    Qué tierno es todo.. es como taaaan... paleta! (en el buen sentido!)

    By Blogger tintaplana, at 8:33 a. m.  

  • Gracias por comprenderme :´-)

    Me ha costado taaaaaaanto salir de este armario!!!

    Por cierto, tenía muchas fotos buenísimas de Maraya recogidas del Google, pero claro, no era plan de poner todas... ¡es que es taaaaaan graciosa!

    By Blogger Mario, at 8:50 a. m.  

  • ¿ Salir del armario? Pero si a la primera ke se descuida el respetable estás proclamando tu Marayapasión!
    Hay ke reconocerte el valor, eso sí.
    ¿ Como va a ayudar a la Withney?
    ¿ Le va a pasar algunos "gramis"?
    Ke peligro tienen esas dos!

    By Anonymous Anónimo, at 12:39 p. m.  

  • Pues para empezar le va a pasar el teléfono de su endocrino pa ver si la Whitney nos engorda un poquito... que ya ni se la ve!

    By Blogger Mario, at 12:58 p. m.  

  • ¡Madre mía!

    By Anonymous Anónimo, at 12:40 p. m.  

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